Cuando parecía que el partido terminaría con un simple empate a cero, de un tiro libre a las puertas del área ecuatoriana Messi le dio la victoria a Argentina.
En un estadio nuevamente lleno la hinchada de la selección Argentina recibió en un Monumental a cancha llena a los jugadores campeones del mundo.
La selección arrancó dominando durante los primeros minutos. La pelota, por los pies de De Paul y Enzo Fernández, se movía de un lado a otro con tranquilidad. Con proyecciones de Molina y apariciones de Mac Allister y Messi, Argentina tuvo sus mejores oportunidades de la primera etapa, un tiro en el palo de Lautaro y otro disparo de Messi que pasó cerca.
Hacia los 20’ Ecuador se empezó a asentar con Caicedo, Estupiñan y Plata como abanderados de la tricolor. Argentina, sin tanta claridad, dominó el partido pero presentó algunos errores en salida y Ecuador tuvo algunos acercamientos al área de la albiceleste. Argentina levantó a 5’ del final, de la mano de la gente.
Como continuidad del final de la primera parte, el segundo tiempo arrancó con Argentina dominando e incluso tuvo situaciones claras de gol, como aquel tiro en el travesaño de Tagliafico. Sin embargo, Argentina no lograba abrir el marcador e incluso Ecuador dispuso de algunos contraataques, donde Argentina mostró su solidez, sobre todo del Cuti Romero.
Hasta que una falta, cerca del área de Ecuador, puso en los pies de Messi la posibilidad de llevarse los primeros tres puntos en estas eliminatorias. El mejor y más diferencial de la cancha, hizo valer lo que es y dejó estático al surgido de Rosario Central, Galíndez. Golazo.
Pocos minutos antes de alcanzados los 90’, Messi salió reemplazado y le cedió la cinta a Di María. Terminado el partido Leonel nos dejó la frase más importante post-partido “Estaba cansado. Seguramente no será la última vez que empiece a salir antes en los partidos”.