Tras 74 años de sociedad entre Adidas y la selección de Alemania, la DFB (Federación Alemana de Fútbol) anunció el final de la histórica relación.
A partir de 2027 Alemania comenzará a vestir Nike, empresa estadounidense, al menos hasta 2034.
La recepción germana, no obstante, no ha sido la esperada. Los alemanes se mostraron descontentos con el fin de la relación Alemania-Adidas, así como denuncian falta de patriotismo al haber elegido una empresa no alemana, recordando que otra opción, como PUMA, también proviene del país europeo.
Sin embargo, el presidente de la Federación Bernd Neuendorf afirmó estar sorprendido por la reacción del público en general y respondió: “Me han molestado mucho los comentarios de muchos políticos que de repente descubrieron el patriotismo. Hay personas que hace cinco años decían: ‘El amor a la patria me cabrea’ y ahora de repente descubren el patriotismo”.
En el comunicado de la Federación se explicaba que se trató “de una licitación transparente y libre de discriminación”. La DFB pasaría a cobrar más de cien millones de euros, cerca del doble de lo que cobraba con la marca de las tres tiras.
Asimismo, desde el aspecto estético de la vestimenta la propuesta de Adidas habría convencido.
La explicación de una medida previsiblemente impopular se explica a partir del mal pasar económico de la Federación. La eliminación en fase de grupos de los últimos dos mundiales y la eliminación en octavos de la Eurocopa, sólo le permitió recaudar 27 millones de euros entre las tres competencias.
Sumado a ésto, la DFB enfrenta procesos tributarios que podría costarle varios millones, así como en el 2022 inauguró una nueva sede que costó 180 millones de euros, el doble de lo previsto.
De esta manera, Alemania afrontará sus últimos años con su histórica camiseta de Adidas y sólo el tiempo avalará o no esta decisión.