Por Tamara Seput.
La iniciativa cuenta con el apoyo de profesionales de I.N.E.C.O, fundaciones varias y asociaciones profesionales. Quien brinda las clases, prerfiere el anonimato “como estilo de vida” asegura. Las clases son ofrecidas de modo telemático los sábados entre las 10 y las 18 horas como “un servicio al bienestar” general de “toda persona que tenga neurodivergencia” afirma el pedagogo, quien se ocupa a diario de “destacar las potencialidades, no modo terapéutico, si no fáctico, de lo que me pasò a mi, de los que no pasa a quienes vamos a grupos de autoayuda como el inspirado por Manes, o hemos estado en Grupos Leones de adultos de TEA, TDA y otros para ser ùtiles y felices“. En ese sentido, “Luke” (@lukepedagogo) descubrió el ajderez.
“El ajedrez es un juego de estrategia que puede ser muy beneficioso para las personas con TDAH (Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad) ya que puede ayudar a mejorar la concentración, la planificación, la toma de decisiones, la memoria y la capacidad de resolver problemas. Jugar ajedrez puede ser una actividad divertida y estimulante que también ayuda a desarrollar habilidades cognitivas importantes. Además, el ajedrez puede ser una forma efectiva de canalizar la energía y mejorar la autoestima en personas con TDAH”.
El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) es un trastorno neurobiológico que afecta a personas de todas las edades y se caracteriza por dificultades en mantener la atención, controlar los impulsos y regular el comportamiento. Quienes padecen TDAH pueden experimentar desafíos en diversas áreas de su vida, incluyendo el ámbito académico, social y emocional. Sin embargo, es importante destacar que las personas con TDAH también poseen fortalezas y habilidades únicas que pueden potenciarse a través de actividades específicas, como el ajedrez.
El ajedrez es un juego milenario que ha sido valorado a lo largo de la historia por sus beneficios cognitivos, emocionales y sociales. Este juego de estrategia requiere concentración, planificación, memoria, toma de decisiones y control de impulsos, habilidades en las que las personas con TDAH a menudo presentan dificultades. A pesar de esto, numerosos estudios y experiencias individuales han demostrado que el ajedrez puede ser una herramienta efectiva para mejorar el bienestar y la calidad de vida de las personas con TDAH.
Una de las principales ventajas del ajedrez para las personas con TDAH es su capacidad para mejorar la concentración y la atención sostenida. Durante una partida de ajedrez, los jugadores deben enfocarse en el tablero, analizar múltiples posibilidades y visualizar posibles movimientos futuros. Este proceso requiere un alto nivel de concentración que puede ayudar a las personas con TDAH a mejorar su capacidad para mantener la atención en una tarea específica durante períodos más prolongados.
Además, el ajedrez fomenta el desarrollo de habilidades cognitivas clave, como la resolución de problemas, la toma de decisiones y la planificación estratégica. Al enfrentarse a diferentes situaciones en el tablero, los jugadores deben evaluar las consecuencias de sus movimientos, anticipar las jugadas del oponente y ajustar su estrategia en función de los cambios en la partida. Estas habilidades son fundamentales para el desarrollo de la función ejecutiva, que se encuentra comprometida en las personas con TDAH.
Otro aspecto relevante del ajedrez es su capacidad para fomentar el autocontrol y la regulación emocional. Durante una partida, los jugadores deben controlar sus impulsos, mantener la calma ante situaciones desafiantes y gestionar la frustración cuando las cosas no salen como esperaban. Estas habilidades son especialmente beneficiosas para las personas con TDAH, quienes a menudo experimentan dificultades en el manejo de sus emociones y conductas impulsivas.
Además de los beneficios cognitivos y emocionales, el ajedrez también promueve la interacción social y la conexión con otros jugadores. A través de partidas amistosas, torneos o sesiones de práctica, las personas con TDAH tienen la oportunidad de relacionarse con otras personas que comparten su interés por el ajedrez, lo que puede fomentar la construcción de relaciones sociales positivas y el desarrollo de habilidades de comunicación.
Es importante mencionar que la práctica regular del ajedrez no solo proporciona beneficios a nivel individual, sino que también puede tener un impacto positivo en el entorno escolar, laboral y familiar de las personas con TDAH. Al mejorar la concentración, la capacidad de planificación y la regulación emocional, el ajedrez puede contribuir a un mejor desempeño académico, laboral y personal, así como a una mayor autonomía y autoestima en aquellos que lo practican de manera habitual.
En la actualidad, existen iniciativas y programas que buscan promover el ajedrez como una herramienta terapéutica y educativa para personas con TDAH. Estos programas ofrecen clases, talleres y sesiones de juego supervisadas por profesionales especializados en TDAH, con el objetivo de adaptar las actividades a las necesidades y características de cada individuo. Además, algunos centros de tratamiento y organizaciones sin ánimo de lucro han integrado el ajedrez en sus programas de intervención para personas con TDAH, con resultados alentadores en términos de mejoras en la atención, la concentración y el control de los impulsos” escribe LukePedagogo.