La reciente destitución del ministro de Infraestructura, Guillermo Ferraro, por parte del presidente Javier Milei, genera incertidumbre en torno a la continuidad de importantes proyectos, entre ellos la Autovía 5. Este suceso, ocurrido durante la jornada del pasado jueves, ha dejado un vacío en la cartera de Infraestructura, ya que el presidente ha decidido no designar un sucesor, transformando la cartera en una secretaría bajo la supervisión del ministro de Economía, Luis Caputo, quien ahora asume el rol de superministro.

La decisión de Milei de despedir a Ferraro se fundamenta en la responsabilidad que se le atribuye al exministro por la filtración de información sensible después de las reuniones de gabinete de la semana. Esta situación genera un reajuste en la estructura del gobierno, con consecuencias potenciales para proyectos en marcha, como la Autovía 5.

En particular, la Autovía 5 ha sido objeto de atención debido a las promesas realizadas por Ferraro a figuras políticas locales. En una reunión con el diputado nacional de Chivilcoy, Eduardo Falcone, referente del MID en alianza con Libertad Avanza, Ferraro aseguró la continuidad de la obra en el tramo entre Mercedes y Suipacha. Falcone expresó su satisfacción tras una reunión que duró 45 minutos, sin embargo, la destitución de Ferraro plantea interrogantes sobre la viabilidad y continuidad de estos compromisos.

Según informes del portal de noticias La Razón de Chivilcoy, Ferraro no será reemplazado, y la absorción de la cartera de Infraestructura por la secretaría de Economía bajo Caputo plantea dudas sobre la atención y prioridad que se dará a proyectos de infraestructura, como la Autovía 5.

Este cambio en la estructura gubernamental genera preocupación en diversos sectores, especialmente entre aquellos que venían trabajando en conjunto con Ferraro en proyectos específicos. La incertidumbre sobre la continuidad de la Autovía 5 se cierne sobre la región, ya que esta obra de infraestructura vial es crucial para la conectividad y el desarrollo económico en la zona entre Mercedes y Suipacha.

La relación entre Ferraro y Falcone, que parecía promisoria, ahora se ve afectada por la salida abrupta del ministro. La falta de un sucesor designado y la reestructuración ministerial generan un escenario en el que las garantías previas dadas por Ferraro podrían no mantenerse, dejando en entredicho el futuro de proyectos clave como la Autovía 5.