No es la primera vez que se anula un descenso con el torneo iniciado. Ya ocurrió este año en el que se anuló el segundo descenso por los promedios en la primera división, con el torneo ya a medio jugar. Esta vez fue en la Primera Nacional, incluso con la fase regular del torneo ya finalizada.
Tal como se había estipulado a principio de año cuando se anunció el formato de la segunda división argentina, los anteúltimos de las dos zonas iban a tener que disputar un desempate para mantener la categoría.
Con la B Nacional ya acabada en su fase regular, Tristán Suárez había quedado anteúltimo de la Zona B. En la Zona A San Telmo y Almagro que habían quedado en igualdad de puntos, iban a tener que jugar un desempate previo para determinar quién se iba a tener que enfrentar con el equipo de Ezeiza.
La suerte ya estaba echada para estos equipos, que iban a tener que jugar para lograr mantenerse en la Primera Nacional. Ésto era, hasta que en las últimas horas nos enteramos desde AFA de una resolución que anula el tercer descenso previsto.
Iba a ser en el estadio de Platense este sábado 28 de octubre el desempate previo entre San Telmo y Almagro, al que Suárez aguardaba por el perdedor. Es decir, estábamos a 5 días que se disputara el desempate.
Noticia propia de una dirigencia de AFA que no posee previsibilidad y cuya gestión en la selección es un espejismo absoluto del fútbol argentino. Una noticia que afirma formatos de torneos extraños, a contramano del resto del mundo y con sobrepoblación de equipos.
No es sólo la primera división que tiene 28 equipos. Estamos hablando de que se anuló el descenso una categoría que este año fue integrada por 37 clubes. Y no se trata solamente del fútbol grande de Argentina.
El Federal A este año fue compuesto por una suma de 36 equipos de todo el interior del país. El Federal A, desde la disolución del Federal B y C, encuentra debajo suyo el Torneo Regional Federal Amateur del que ascienden 4 equipos de entre más de 200.
Las únicas categorías que tenían un número razonable de equipos y formatos lógicos, eran la Primera B Metropolitana, la Primera C y la Primera D. No obstante, ésto no será más así ya que la Primera C y la Primera D se unificarán a partir del año que viene tendrá 27 participantes. Esto sólo habla de una intención deliberada de sobrepoblar y acumular equipos en las distintas categorías.
De esta manera, sólo la B Metropolitana tendrá un número con sentido de equipos, con 17 integrantes, que el año que viene serán 20. Estamos en presencia de un fútbol argentino cuya reestructuración tomará mucho tiempo, de querer realizarse. Y digo ésto último, porque en principio se preveía una reestructuración de la primera división, por ejemplo.
Se preveía que a partir de este año descendieran tres equipos, y ascendieran dos, de modo que paulatinamente se fuera reduciendo el número de equipos hasta llegar a los 22. Ésto, quedó cancelado a partir de la anulación del segundo descenso por promedios y que no ha hecho otra cosa que confirmar el rumbo del fútbol argentino con Chiqui Tapia.